¿Qué es una sobrecamisa y cuando utilizarla?

A todos nos ha pasado alguna vez cuando llega la primavera o el otoño. ¿Hace demasiado calor para la chaqueta? ¿Demasiado fresco para ir solo con camiseta?

La sobrecamisa es una prenda muy versátil que parece diseñada especialmente para aquellos que disfrutan de la vida al aire libre, pero que no quieren renunciar a ir siempre bien vestidos. Una prenda que no es ni una camisa ni una chaqueta, pero que cumple la función de ambas y que, además de ser comodísima, es capaz de abrigar sin agobiar.

Pero, ¿qué es una sobrecamisa? ¿En qué ocasiones suele llevarse? Y, lo más importante, ¿cómo podemos combinarla?

¿Qué es una sobrecamisa?

También conocida como overshirt, la sobrecamisa es una prenda a medio camino entre la camisa y la chaqueta. Cuenta con el diseño básico de una camisa, con botones y cuello clásico, pero confeccionada en tejidos más gruesos, como el algodón, la lana, la pana o incluso el denim.

Su principal función es servir de capa intermedia: ni tan cálida como una chaqueta tradicional ni tan ligera como una camisa común, lo que la convierte en una opción ideal para el entretiempo, pero también para esas noches de verano en las que refresca.

Diferencia entre camisa, sobrecamisa y chaqueta

La diferencia entre una camisa, una sobrecamisa y una chaqueta radica principalmente en su diseño y en el papel que juega dentro del conjunto. La camisa, por ejemplo, está pensada para ser una capa interior. Es ligera, normalmente está confeccionada con lino o algodón, y se ajusta más al cuerpo. Ideal para climas cálidos o como base bajo una americana.

Por otro lado, tenemos la chaqueta es una prenda exterior fabricada en lana, cuero o tejidos más gruesos. Además, muchas veces incluye un forro para abrigar más en invierno. 

Como prenda intermedia, encontramos la sobrecamisa, que se ha ido abriendo hueco en el armario masculino gracias a su enorme versatilidad. No suele tener forro como el abrigo, lo que la hace ligera y fácil de llevar, pero su tejido, más denso que el de una camisa, protege mejor contra el viento y las temperaturas más frescas.

Pudiendo usarse sola sobre una camiseta o como una capa intermedia entre una prenda base y un abrigo más grueso. 

Por eso, si alguna vez has dudado sobre si llevar camisa o chaqueta, la sobrecamisa es el comodín perfecto.

Características principales

Ahora que ya sabes qué es una sobrecamisa, queremos explicar cuáles son las características que debe tener:

• Tejido medio-grueso: algodón, franela, pana o denim.
• Corte amplio: lo suficiente para permitir llevar otra prenda debajo.
• Bolsillos funcionales: al menos uno o dos en el pecho. Muchas incluyen bolsillos laterales tipo chaqueta.
• Versatilidad térmica: permite jugar con las capas sin pasar ni frío ni calor.
• Diseño minimalista o utilitario: desde modelos lisos en tonos neutros (verde oliva, azul marino o beige) hasta opciones con cuadros o acabados desgastados.

¿Cuándo y cómo usar una sobrecamisa?

Una de las mayores ventajas de esta prenda es su versatilidad. Perfecta para el día a día en el campo, una tarde de paseo a caballo o una barbacoa al atardecer. ¿Y lo mejor? La misma sobrecamisa que llevas para dar un paseo por el campo puede acompañarte a una cena informal sin necesidad de cambiar de look.

Entretiempo: primavera y otoño

Sin duda, la primavera y el otoño son las mejores épocas para la sobrecamisa, ya que las temperaturas pueden ser muy imprevisibles. Salimos por la mañana con fresco, al mediodía hace calor y al anochecer vuelve a refrescar.

Una sobrecamisa ligera de algodón es ideal en estos casos. Llévala sobre una camiseta básica si hace calor o súmale un jersey fino si el día se presenta más nublado. 

Como capa ligera en looks casuales

Para esos días en los que no queremos complicarnos, pero sí vernos bien, podemos combinar una sobrecamisa con un pantalón chino, unas botas cómodas y una camiseta lisa.

¿Vas a recibir la visita de unos amigos? Ponte una sobrecamisa abierta sobre una camiseta de algodón y unos vaqueros. Práctico, cómodo y con estilo.

En capas: sobre camiseta o jersey

Una de las principales ventajas del corte amplio de la sobrecamisa es su capacidad para adaptarse a diferentes capas:

• En primavera: sobre camiseta de manga corta o larga.
• En invierno: sobre jersey de lana o incluso sudadera con capucha.
• En verano: abierta, como si fuera una camisa ligera para protegerte del sol o del viento

¿Cómo combinar una sobrecamisa según el estilo?

Hay mil maneras de llevar una sobrecamisa, pero dependerá mucho del entorno en el que vivamos. 

Casual urbano

Una sobrecamisa en verde o en tonos tierra, combinada con unos vaqueros oscuros y unas buenas zapatillas, es una fórmula que nunca falla. Complementa el conjunto con una gorra de algodón y una mochila, y tendrás un look urbano ideal para ir a la ciudad a hacer recados.

Smart casual

Para ocasiones más formales, puedes elegir un modelo en gris o en azul marino. Combínala con unos chinos beige, un polo de algodón o camisa y unos mocasines. Ideal para celebraciones en el campo, una comida familiar o una cita informal.

Look de fin de semana

Imagina un sábado de paseo a caballo por la mañana y una tarde de barbacoa al sol. En esos días en los que queremos vestirnos una sola vez y olvidarnos del resto, puedes optar por una sobrecamisa sobre una camiseta blanca y unos pantalones cargo o unos vaqueros. Añade un cinturón de cuero y unas botas. 

Outfit de viaje

Cuando viajamos, necesitamos ropa práctica, pero con la que nos sintamos a gusto. La sobrecamisa es fácil de guardar, no se arruga, abriga y estiliza. Perfecta para aeropuertos, estaciones o incluso para un viaje en coche. Con una sobrecamisa beige con bolsillos, un pantalón vaquero y una gorra, irás cómodo todo el trayecto y preparado para cualquier plan.

En definitiva, tanto si vas a pasar una mañana en el campo como si has quedado con unos amigos para comer, la sobrecamisa es una prenda ideal para ir cómodo y bien vestido a cualquier parte. Por eso, estamos seguros de que, una vez que la pruebes, no querrás salir de casa sin ella.